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El pasado 24 de octubre se llevó a cabo un nuevo Desayuno Virtual de ForoCompetencia, junto a Nuno Cunha Rodrigues, presidente de la Autoridade de Concorrencia de Portugal (“AdC”). En su exposición, Cunha se refirió a la interacción entre libre competencia y materias de sustentabilidad medioambiental, y a las recientes medidas adoptadas por autoridades de competencia, que promueven la protección del medio ambiente y el fomento de la competencia.
Cunha inició su exposición señalando que, en el último tiempo, la política de la competencia ha sido convocada a entrar en diálogo con diversas problemáticas sociales, como la protección de privacidad y datos personales (ver nota CeCo: OCDE: Competencia y datos personales), los mercados digitales y la sustentabilidad.
En ese sentido, y considerando la actual preocupación por la situación medioambiental, Nuno introdujo la idea de un “derecho de competencia 2.0”, que incorporaría instrumentos y herramientas propios de otras políticas al derecho de competencia, con el fin de hacer frente a los nuevos desafíos. A su juicio, esto requiere que la comunidad de competencia reflexione sobre su papel y su modo de trabajar, así como de la existencia de un diálogo entre distintas políticas públicas.
Cunha señaló que, en principio, la sustentabilidad y la política de competencia pueden parecer áreas que no coinciden, pues la primera prioriza la conservación de recursos naturales y el equilibrio planetario a largo plazo, mientras que la segunda busca promover mercados abiertos y competitivos, enfocados en el bienestar de los consumidores.
Sin embargo, desde su punto de vista ambas disciplinas pueden ser complementarias, en tanto la libre competencia puede ser un instrumento que favorezca la transición hacia una economía sostenible. Esto sería posible debido a la flexibilidad del concepto de bienestar del consumidor, que permite integrar otras dimensiones valiosas para los consumidores y la sociedad en general (ver nota CeCo: OCDE: Bienestar del consumidor y estándares alternativos). En ese sentido, agregó que los consumidores juegan un rol fundamental, a raíz del aumento de conciencia acerca de las consecuencias de sus decisiones y una mayor preferencia de productos que respetan estándares ambientales y éticos. A su vez, las empresas se encuentran invirtiendo en soluciones verdes y prácticas de negocio sostenibles, lo que les permite adquirir una ventaja competitiva al ofrecer productos más atractivos a los consumidores.
A continuación, Cunha se refirió al papel de las agencias de competencia, rol que se plasmaría en 3 líneas de acción: defensa, guía y enforcement.
Así, por una parte, corresponde a las autoridades resguardar que las políticas públicas – incluyendo políticas medioambientales– sean pro-competitivas. En concreto, señaló que las políticas no deben restringir la entrada de nuevos competidores al mercado, ni favorecer a ciertos actores sobre otros. Para alcanzar dicho objetivo, Cunha afirmó que las agencias deben involucrarse activamente en discusiones políticas, lo que permitiría contribuir a un futuro más justo, verde e innovador, que beneficie a los consumidores a largo plazo. (ver nota CeCo: Cooperación internacional entre agencias de competencia: ¿Un sueño imposible?).
Por otra parte, Cunha indicó que las agencias de competencia deben ofrecer guías que aclaren los límites legales de las actividades empresariales, de forma de evitar infracciones (ver nota CeCo: Guía de acuerdos de sostenibilidad en UK: Medioambiente y cambio climático); al mismo tiempo, las agencias deben permanecer vigilantes y dispuestas al despliegue de sus facultades de enforcement cuando dichos límites no se respeten.
Luego, el expositor destacó la importancia de la colaboración entre empresas para alcanzar objetivos de sostenibilidad, especialmente en áreas como la transición a energías renovables y la reducción de emisiones de carbono. Sin embargo, advirtió que esta colaboración debe ser monitoreada rigurosamente para prevenir el «greenwashing«, práctica que podría derivar incluso en la celebración de acuerdos de sostenibilidad como formas encubiertas de colusión (ver nota CeCo: Acuerdos de Cooperación Verde ¿la mejor forma de llegar a un desarrollo sostenible?).
Siguiendo la línea anterior, Cunha recalcó la necesidad de ofrecer a las empresas lineamientos para la adopción de acuerdos de colaboración en materia de sustentabilidad. Al respecto, se refirió a las Directrices sobre la aplicabilidad del artículo 101 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea a los acuerdos de cooperación horizontal(“Directrices”), cuyo capítulo 9 regula los acuerdos de sostenibilidad.
Cunha destacó tres elementos principales de las Directrices, relacionados con el asesoramiento de los acuerdos por parte de las autoridades europeas: En primer lugar, señaló que debe entenderse el concepto de sustentabilidad en sentido amplio, abarcando no solo iniciativas ambientales, sino también objetivos sociales como la protección de derechos laborales y derechos humanos.
En segundo lugar, mencionó que el análisis de beneficios y eficiencias derivados de los acuerdos no contempla los efectos en toda la sociedad, sino que se enfoca sólo en los consumidores del mercado relevante afectado.
En tercer lugar, Cunha sostuvo que las Directrices proporcionan un «soft safe harbour» o una protección para la adopción de estándares de sostenibilidad, bajo seis condiciones copulativas: (i) transparencia en el procedimiento de desarrollo del estándar; (ii) el estándar debe fijarse mediante participación voluntaria; (iii) libertad para aplicar estándares más altos de sostenibilidad; (iv) el cumplimiento del estándar no debe implicar el intercambio innecesario de información sensible; (v) asesoramiento abierto y no discriminatorio; y, (vi) que no se produzca un aumento significativo en precios o reducción en calidad, o que la participación de mercado de las partes del acuerdo no puede exceder un 20% en el mercado relevante afectado por el estándar.
Luego, siguiendo el ejemplo a nivel regional, Cunha señaló que la AdC ha elaborado una guía sobre Buenas Prácticas en acuerdos de sostenibilidad, basada en información recopilada a través de consultas públicas a empresas, asociaciones de consumidores, y otros actores relevantes. Esta guía está diseñada para ser accesible para empresas de todos los tamaños, utilizando un lenguaje claro y ejemplos prácticos, lo que simplifica el proceso de evaluación para determinar si un acuerdo es compatible con la ley de competencia. Asimismo, la guía ofrece un diagrama de flujo para determinar cuándo los acuerdos pueden infringir la ley, y un listado detallado de las exenciones y condiciones de aprobación, necesarias para una adecuada auto evaluación.
A continuación, Cunha mencionó otras iniciativas llevadas a cabo por la AdC durante los años 2023 y 2024, como los comentarios a la Propuesta de Gobierno sobre el plan estratégico para desechos no urbanos (PERNU 2030), y el estudio de mercado sobre Competencia y recargas de vehículos eléctricos en Portugal.
Para profundizar en lo anterior, el expositor se refirió al caso de los autos eléctricos, considerados como una de las herramientas claves para el proceso de “descarbonización” de la economía; para alcanzar esto, sin embargo, es necesario que exista una red de estaciones de carga de autos eléctricos que sea eficiente, accesible y competitiva.
Para abordar estos desafíos, la AdC ha emitido un conjunto de recomendaciones dirigidas al gobierno y a las autoridades municipales, como, por ejemplo, la implementación de un sistema de cargadores de acceso directo, sin requerir a los usuarios firmar contratos previos con proveedores de movilidad eléctrica. Esta solución simplificará la experiencia para los consumidores y fomentaría una mayor transparencia en los precios de las cargas, promoviendo la competencia.
Por último, Cunha cerró su exposición enfatizando en la importancia de enfrentar los desafíos de la sustentabilidad y sostenibilidad, los cuales no sólo tienen efectos en el medio ambiente, sino que además generan repercusiones significativas en el ámbito social y económico (ver nota CeCo: Sustentabilidad y Competencia: Día de la Competencia OCDE 2021).